- No es necesario contacto visual entre el lector y la etiqueta RFID, ya que la onda de radio puede atravesar una gran variedad de materiales.
- Los datos pueden ser almacenados y reprogramados directamente mientras se realiza la lectura.
- Permite realizar lecturas en bloque en entornos extremos porque el tag puede estar protegido del exterior.
Existen diferentes tipos de etiquetas RFID dependiendo de la aplicación: NFC, HF, UHF. Así mismo los principales casos de éxito para esta etiqueta son:
- Identificación de piezas en origen, trazabilidad.
- Identificación para ofrecer un posterior servicio técnico, recibiendo información variable del producto etiquetado.
- Identificación e información variable, control anti-falsificación para productos.
- Control de mercancías.
- Control de stocks, anti-hurto.
Por tanto, este tipo alternativa es idónea para un gran número de sectores con necesidades de incorporar información variable a su producto: sector logístico, alimenticio, cosmético, textil, vinos, electrónico, aeroportuario.